La Policía Nacional detiene a dos jóvenes que tienen más de 12 años de prisión pendientes de cumplir en Alemania

19/11/2013

Agentes de la Policía Nacional han procedido a la detención de dos jóvenes de 26 y 29 años de nacionalidad alemana, al encontrarse reclamados por la Fiscalía de Müller (Alemania) al constarles en vigor dos órdenes de detención para su extradición.

Los hechos sucedieron en la tarde del día 10 de noviembre cuando agentes de la Brigada de Respuesta a la Inmigración Clandestina (B.R.I.C.) se encontraban de servicio en el Puesto Fronterizo de Beni Enzar. Hacia las 20:00 horas dos jóvenes se aproximaron a la zona de control peatonal de entrada a territorio español mostrando síntomas de nerviosismo, lo que hizo sospechar a los policías de la B.R.I.C.

Al revisar por medios informáticos su documentación, los policías comprobaron que estos jóvenes tenían en vigor sendas órdenes de búsqueda y detención para extradición decretadas por autoridades alemanas. Una vez realizadas las comprobaciones pertinentes, se procedió a su detención y traslado a los calabozos de esta Jefatura Superior.


Gestiones posteriores en Jefatura Superior de Policía

Al día siguiente, los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (U.D.E.V.) se hicieron cargo de los trámites posteriores a estas detenciones, al objeto de cumplimentar las órdenes de extradición solicitadas. La Unidad de Cooperación Policial Internacional informó a la U.D.E.V. de los motivos por los que la Fiscalía de Müller (Alemania) había cursado las órdenes de detención y extradición.

El joven de 26 años tenía pendiente el cumplimiento de una pena de dos años y seis meses de prisión por la comisión de tres robos con fuerza en otros tantos vehículos. El de 29 años había participado en un delito de robo con violencia conexo con otro de extorsión, hechos por los que había sido condenado a una pena de cárcel de 10 años.


Intento de fuga de calabozos

A las 19:00 horas del 11 de noviembre, agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana que prestaban servicio en los calabozos de Jefatura se percataron de que estos detenidos, que compartían celda, habían atado a modo de cuerda varios jirones de sus mantas, realizando una coca en uno de sus extremos. Con esta improvisada lazada intentaban manipular el pestillo que cierra la puerta del calabozo para intentar su fuga.

Los policías procedieron de inmediato a una revisión a fondo de la celda por su hubiera más objetos, así como a separar a ambos en calabozos distintos.


Los jóvenes fueron puestos el día 12 a disposición del Juzgado de Instrucción Número Dos de los de Melilla. Posteriormente, el 13, del Juzgado Central de Instrucción Número Cinco en Madrid para su extradición a Alemania.