La Guardia Civil desmantela una banda dedicada al robo con violencia de vehículos y tráfico de drogas

21/06/2008

Han sido esclarecidos más de un centenar de delitos.-

 

·        En la operación “LEPANTO”, desarrollada en Murcia y Alicante, han sido detenidos 13 integrantes de una banda organizada dedicada al robo con violencia de vehículos de gama media-alta, su modificación y falsificación para posterior distribución, además de tráfico de drogas.
 
·        Para cometer los robos utilizaban una fuerza extrema, causando, en ocasiones, lesiones graves a las víctimas.
 
·        Se ha intervenido numerosa documentación relacionada con la falsificación de documentación de los vehículos y placas dobladas, dinero en efectivo y sustancias estupefacientes.

La Guardia Civil de Murcia, en el transcurso de la operación “LEPANTO”,  desarrollada en Murcia y Alicante, ha procedido a la desarticulación de una banda organizada compuesta por DOS grupos interconexionados dedicados al robo de vehículos de gama media-alta, manipulación de los mismos y falsificación de su documentación y matrículas, y su posterior distribución en el mercado ilícito.

 
En la operación desarrollada por la Guardia Civil se han practicado 6 registros en viviendas y naves industriales, y han sido detenidos 13 integrantes -- uno de ellos menor de edad -- de ambos grupos, presuntos autores de más de un centenar de robos.
 
Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de enero, a raíz del robo de un vehículo cometido en San Javier (Murcia), en el que los supuestos autores utilizaron una violencia extrema contra la víctima, a la que le causaron lesiones de considerable gravedad.
 
Las primeras investigaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil permitieron determinar que los autores eran de nacionalidad marroquí, que podrían ser integrantes de una red delictiva organizada, con gran movilidad actuante, la cual podría ser la responsable de la alarma social existente entre la población de la comarca murciana del Campo de Cartagena.
 
Posteriormente se pudo saber que los supuestos autores de estos graves hechos delictivos integraban un grupo dedicado a cometer delitos violentos en distintas localidades de Murcia y Alicante, dirigido por otra persona también marroquí.
 
Una vez localizados, la Guardia Civil estableció una serie de dispositivos de investigación y vigilancia que permitieron conocer como este grupo tenía una gran movilidad, logrando averiguar sus identidades y domicilios.
 
El objetivo de este primer grupo era la sustracción de vehículos de gama media-alta, utilizando violencia e intimidación. Los vehículos interesados debían ser prácticamente nuevos, con antigüedad de un año aproximadamente. El perfil de la víctima era el de personas de edad avanzada y actuaban en zonas rurales.
 
Seguidamente se pudo comprobar como el director de este grupo también coordinaba otro grupo delictivo, que se dedicaba, una vez que el vehículo estaba en poder de la banda, a la transformación del mismo y la falsificación de documentación y las placas de matrícula, para evitar su identificación como robado.
 
Una vez que se logró identificar plenamente a los integrantes de este segundo grupo, se coordinó la fase de explotación de la investigación, estableciendo un amplio dispositivo compuesto por un centenar de agentes, en el que se llevaron a cabo, previa autorización judicial, 5 registros en viviendas y 1 en una nave industrial, donde se procedió a la detención de 13 personas integrantes de la red delictiva, una de ellas menor de edad, como supuestos autores de los delitos de ASOCIACIÓN ILÍCITA, ROBO CONTINUADO CON VIOLENCIA E INTIMIDACIÓN, TRÁFICO DE DROGAS y FALSEDAD DOCUMENTAL.
 
Detenidos:
 
-     A.H., (jefe de la red) marroquí y 25 años y T.M.D.M. española de 30 años.
 
-      Primer Grupo:     A.G.; A.B.; Y.D.; K.Z.; A.M.; B.CH.; H.H.; todos de nacionalidad marroquí y con edades comprendidas entre 19 y 27 años, y un menor de edad.
 
-      Segundo Grupo: A.D.; de 31 años y nacionalidad Lituana, R.T.; y A.K.; de origen marroquí y con 28 y 32 años de edad.
 
 
En los registros domiciliarios se intervinieron numerosos efectos relacionados con la actividad ilícita de esta red, como gran cantidad de documentación, placas de matrículas sustraídas y modificadas, llaves maestras, 8.000 dosis de hachís preparadas para su distribución, así como efectos procedentes de los robos cometidos, como ordenadores portátiles, tv de  plasma, cámaras de video y fotografía, teléfonos móviles, dinero en efectivo.
 
 
Modus Operandi
 
El máximo responsable de la banda, coordinaba dos grupos delictivos conectados entre sí. El primer grupo se dedicaba al robo de vehículos. Siempre actuaban en caminos de zonas rurales y su objetivo eran vehículos prácticamente nuevos y conducidos por personas mayores.
 
Antes de actuar tomaban todo tipo de precauciones, como que la zona estuviera despejada. Primero intentaban despistar a la víctima manteniendo conversaciones con ésta, como la solicitud de trabajo, y en el momento menos esperado la asaltaban, golpeaban e intimidaban, para posteriormente sustraerle todos los efectos personales como dinero, documentación, joyas, teléfonos móviles, y en dos ocasiones sustrajeron hasta armas de fuego, emprendiendo la huída en el vehículo hasta un lugar seguro. El jefe de la estructura procedía entonces  a la negociación con personas en Marruecos, para la distribución del vehículo en el mercado ilícito de este país.
 
Una vez hecho el trato, comenzaba la labor del segundo grupo, cuya misión era la modificación de todos los elementos identificativos del vehículo, como el número de bastidor, matrículas y documentación, para proceder a su exportación ilegal. Estas labores las llevaban a cabo en una nave industrial y en la parcela de un domicilio, donde con maquinaria industrial modificaban los vehículos, colocaban placas de matrículas adquiridas de manera ilícita, y falsificaban permisos de circulación temporal, para camuflar el vehículo robado. Una vez preparado, el vehículo era trasladado por carretera hasta Marruecos, donde procedían a su venta por un precio muy inferior al de mercado. Si el vehículo sustraído no tenía salida en el mercado ilícito, lo desmontaban completamente, para venderlo por piezas.
 
Los integrantes de la red, a su vuelta hasta las residencias españolas, trasladaban sustancias estupefacientes, generalmente hachís, para su distribución a otras redes delictivas.
 
 
Hasta el momento y a falta de analizar la documentación intervenida, se han esclarecido 130 delitos aproximadamente, cometidos en distintas localidades de MURCIA (Cartagena, El Algar, Pozo Aledo, Avileses, Balsicas, Dolores, Alquerías, San Pedro del Pinatar, El Mirador, Torre Pacheco, El Albujón, Librilla, Cieza, Fortuna, Alhama, Los Alcázares, Fuente Álamo y Lobosillo), ALICANTE, (Callosa de Segura, Cox, Almoradí, Benejúzar, Albatera, Crevillente, Torrevieja y Orihuela), VALENCIA ( Xátiva) y MADRID ( Alcalá de Henares y Fuenlabrada).
 
 
El Juzgado de Instrucción número DOS de San Javier (Murcia), ha desarrollado la dirección judicial de esta operación.
 
Esta operación ha sido llevada a cabo por componentes de la Guardia Civil de Murcia, pertenecientes a la Unidad Orgánica de Policía Judicial, participando en los registros domiciliarios la Unidad de Seguridad Ciudadana y el Servicio Cinológico, así mismo con Unidades de la Guardia Civil de Alicante.