Desarticulada una organización criminal que traficaba hachís y cocaína en Lleida y Huesca
25/11/2016
La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal dedicada al tráfico de hachís y cocaína en las provincias de Lleida y Huesca y que ha culminado con la desmantelación de un clan familiar en el barrio del Perpetuo Socorro de la capital oscense. Los líderes de la organización habían establecido su base de operaciones en la ciudad ilerdense, donde disponían de tres pisos de seguridad que utilizaban para cometidos distintos: almacenar los alijos, ocultar la documentación y el dinero obtenido de estas actividades, y realizar las operaciones diarias de venta de droga. La mercancía era trasladada hasta el piso-almacén por otros dos miembros del grupo encargados de transportar por el método Go Fast los fardos de hachís recién descargados en las localidades costeras del sur de la península. Desde esta vivienda de Lleida, la droga era distribuida por otro integrante al siguiente escalón de la organización: los encargados de la venta al por menor. En Huesca los responsables de esta ulterior distribución formaban parte de un clan familiar que disponía de dos viviendas desde las que suministraban la droga a aquellos traficantes que contactan con el consumidor final.
Inicio de las investigaciones
La operación se inició en el mes de mayo, a raíz de diversas detenciones realizadas en la provincia de Huesca por la tenencia de sustancias estupefacientes destinadas al tráfico. Los investigadores iniciaron sus pesquisas para averiguar quién estaba suministrando a estos vendedores al menudeo, descubriendo que éstos se proveían en el domicilio de un clan familiar asentado en la capital altoaragonesa y que, a su vez, éstos obtenían la mercancía de una organización asentada en Lleida.
Los cabecillas de esta organización, dos hermanos de origen magrebí, estaban afincados en la capital leridana, donde disponían de tres pisos de seguridad. En un piso ocultaban el dinero y la documentación, otro era utilizado como almacén de los alijos, y un tercer domicilio estaba dedicado a las transacciones diarias.
Método Go Fast
La droga era trasladada hasta el piso-almacén por otros dos miembros de la organización, encargados exclusivamente del transporte de los fardos de hachís recién descargados en las localidades costeras del sur de España.
La conducción la realizaban por vía terrestre por el método denominado Go Fast: viajando en caravana de vehículos de alta gama, portando todo el cargamento de droga solo en uno de los coches, mientras que el resto realizaban una escolta con el cometido de avisar con antelación de posibles controles o dispositivos policiales y detectar seguimientos o vigilancias. El trayecto se realizaba directo, sin paradas por el camino, evitando así poder ser detectados en cualquier gasolinera o área de servicio. Además, estos integrantes estaban provistos de documentación falsa, para tratar de evadir una identificación o control policial.
Distribución de la droga
Una vez descargada la mercancía en el piso de seguridad de Lleida, la droga era distribuida por diversos puntos de la zona noreste de España.
Los agentes localizaron además otro piso desde donde la organización realizaba el tráfico al por menor en esta ciudad, e interceptaron asimismo al miembro del grupo encargado de la distribución a localidades próximas cuando transportaba una mercancía destinada a Huesca.
En esta ciudad altoaragonesa, la droga era distribuida por un clan familiar, que disponía de dos viviendas en el barrio del Perpetuo Socorro desde las que suministraban la droga a aquellos traficantes que contactan con el consumidor final. Durante la operación se detuvo a cuatro de sus miembros, así como a diez vendedores al por menor de la provincia de oscense.
Resultados:
La operación es el resultado de una investigación iniciada en mayo por la Brigada Provincial de Policía Judicial de Huesca y dirigida por el Juzgado de Instrucción número cuatro de esta localidad. En la misma han participado también las Unidades de Drogas y Crimen Organizado de Lleida y Zaragoza, así como el Grupo de Operaciones Especiales y la Unidad de Prevención y Reacción de la Jefatura Superior de Policía de Aragón para la entrada en los domicilios de la organización.
Esta intervención policial se ha saldado con diecinueve detenidos: cinco de ellos integrantes de la organización criminal de origen magrebí, cuatro miembros del clan familiar de Huesca, y diez vendedores al por menor en la provincia oscense.
Los agentes han realizado siete registros domiciliarios, aprehendiendo un total de 57 kilogramos de hachís y dos kilogramos de cocaína. Asímismo los investigadores interceptaron una de las caravanas que viajaban desde el sur de España, y que transportaban tres fardos conteniendo 100 kilogramos de hachís con destino al piso de seguridad de la organización.
Los detenidos, acusados de delitos de pertenencia a grupo criminal, tráfico de drogas, falsificación documental y delito contra la seguridad vial, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número cuatro de Huesca, encargado de las investigaciones.