AESA concede al aeropuerto de Barcelona-El Prat el certificado europeo de seguridad operacional

25/10/2017

La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), dependiente del Ministerio de Fomento, ha otorgado el Certificado Europeo de Aeródromo al Aeropuerto de Barcelona-El Prat, una vez que ha verificado documentalmente e in situ el cumplimiento de los requisitos técnicos de diseño y operación establecidos para el conjunto de las infraestructuras y sus equipos, tal como exige la normativa europea de certificación.

Este es el vigésimo segundo aeropuerto en España al que AESA concede el certificado de acuerdo con el Reglamento Europeo nº 139/2014, que uniformiza los criterios de cumplimiento y la estructura de la documentación a nivel europeo, y amplía los requisitos exigidos a las organizaciones que gestionen los aeródromos, en ámbitos como la competencia del personal, adecuación de recursos y garantías de solvencia técnica y financiera.

Los aeropuertos que ya lo tienen son los de Vigo, Santiago de Compostela, Palma de Mallorca, Tenerife Norte, Pamplona, A Coruña, Gran Canaria, Valencia, Jerez, Granada-Jaén, Tenerife Sur, Ibiza, Málaga, Madrid, Sevilla, Bilbao, Menorca, Reus, Logroño, Santander y Vitoria.

A partir del 1 de enero de 2015 y con fecha límite 31 de diciembre de 2017, todos los aeropuertos comerciales que superen unos valores mínimos de transporte de pasajeros o carga, y que dispongan de procedimientos instrumentales, deben obtener o convertir su certificado de aeródromo conforme a este Reglamento. AESA está trabajando con los gestores de aeródromo para finalizar los 13 procesos restantes antes de que concluya el año.

Para otorgar este certificado, los técnicos de AESA también han comprobado que el gestor aeroportuario AENA tiene implantado un Sistema de Gestión de la Seguridad Operacional acorde a los requisitos de la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI) en el aeropuerto de Barcelona-El Prat. El certificado sitúa a estas instalaciones en el primer nivel de los estándares internacionales de seguridad, ya que para obtenerlo el gestor ha tenido que adaptar sus sistemas de gestión y sus infraestructuras para dar cumplimiento a los requisitos establecidos.