MENSAJE DE NAVIDAD 2010

 MENSAJE DE NAVIDAD 2010

22/12/2010

 

Quiero aprovechar esta ocasión para trasladar mi cariñosa felicitación a todos los melillenses que, en estas fechas entrañables, celebramos la festividad de la Navidad, el nacimiento de Jesús, deseándoles que la disfruten en compañía de sus familiares, de sus amigos, de todos sus seres queridos, en un ambiente de concordia, con esperanza y con alegría. Una alegría extensiva a todos los melillenses, pues, si bien es verdad, que estas fechas son especialmente señaladas para la comunidad cristiana, no es menos cierto, que la alegría es compartida por el resto de comunidades que integran la sociedad melillense. Una sociedad cuyo rasgo de identidad fundamental es, sin duda, el encuentro de creencias, de tradiciones y de costumbres. Una sociedad viva y dinámica que vamos construyendo entre todos los ciudadanos a través de la convivencia cotidiana. Una sociedad que está llamada a alcanzar, cada vez más, la unión en su diversidad y la cohesión en su interculturalidad. Una sociedad y una ciudad a la que amamos y de la que tenemos sobrados motivos para sentirnos orgullosos.
 Éste ha sido sin duda un año duro. Un año que ha estado marcado por la crisis que atraviesa, no sólo nuestro país, también Europa y gran parte de las economías desarrolladas del mundo. Una situación que ha hecho que el Gobierno tenga que adoptar, para su superación, medidas y decisiones difíciles que han supuesto, en muchos casos, reformas y ajustes. Son unas medidas que, en último término, apelan a la responsabilidad común; a la necesidad del esfuerzo y la solidaridad de todos los ciudadanos. Se han generado situaciones complicadas y difíciles, tanto a nivel social como personal. Por eso, en un día como hoy quiero solidarizarme especialmente con aquellos que peor lo están pasando y hacer un llamamiento para que juntos, redoblemos esfuerzos para que Melilla pueda crecer y crear empleo. Esta es una tarea de todos, y en ese empeño común, puedo garantizar que el Gobierno de España tiene como máxima prioridad en sus políticas recuperar la senda del crecimiento económico y la creación de empleo sin debilitar, sino reforzando, los pilares básicos del estado de bienestar.
Hacernos más fuertes sin abandonar por el camino a los más débiles. Este ha sido y es el compromiso que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero asumió desde el principio con España. Un compromiso que sigue teniendo vigencia plena y que se demuestra, en que se siguen incrementando los esfuerzos para dar protección a los que más lo necesitan. En Melilla, un ejemplo de este compromiso es la creación de un nuevo centro de promoción de la autonomía personal, que atenderá a personas con discapacidades físicas graves y generará un importante número de puestos de trabajo. De igual forma, se mantendrán todos los compromisos y prestaciones de la Ley de Dependencia.
 
 Seguimos comprometidos también con una sanidad pública y gratuita a todos los melillenses con mayores y mejores medios que, en pocos años, se verán incrementados cuando comience a funcionar el nuevo hospital Universitario cuyas obras marchan a buen ritmo y con presupuesto garantizado para asegurar su finalización en el plazo acordado.
Se mantiene también nuestro compromiso por una educación pública de calidad, adaptada a los nuevos tiempos. Se han aumentado las inversiones en esta materia y se proyectan nuevas actuaciones para ampliar la red de centros escolares de Melilla o dotar de mayor capacidad a los ya existentes. Este año hemos inaugurado la nueva escuela de Educación Infantil “Melilla”, del Ministerio de Defensa, para niños de cero a tres años. En los próximos meses iniciaremos las obras del nuevo Conservatorio, la Escuela Oficial de Idiomas y el Centro de Adultos. El Gobierno de España va conservar su compromiso con la Administración Local para seguir manteniendo las escuelas infantiles así como el desarrollo de programas pedagógicos.
 
 El desempleo que sufre Melilla es algo que nos preocupa y nos ocupa. Buscar nuevas alternativas para el desarrollo económico de la ciudad y renovar el tejido productivo y económico de Melilla y generar empleo y luchar contra el paro estructural, es una misión en la que debemos embarcarnos todos y en ello se encuentra el Gobierno de España con la financiación de planes de capacitación a través de la Formación Profesional reglada, los cursos de aprendizaje para desempleados, las escuelas taller o las casas de oficio. En tanto, las políticas activas de empleo vienen a paliar la situación de aquellas familias melillenses que sufren con mayor rigor las consecuencias de la falta de trabajo. En estas fechas 1.500 personas han comenzado a disfrutar de un puesto laboral gracias al empeño y la inversión del Ejecutivo que preside Rodríguez Zapatero. Los planes de empleo suponen un respiro para muchas familias melillenses, pero es cierto, que el camino, además de éste, debe ser el de la innovación, el de la formación y el esfuerzo para generar yacimientos de empleo más estables y firmes.
 
 En el año que acaba se han materializado importantes inversiones en infraestructuras que el Gobierno de España ha llevado a cabo, mejorando la calidad de vida de todos los melillenses. Por citar algunas, resalto la creación de playas a mar abierto en la Alcazaba y Horcas Coloradas con un paseo marítimo que hace posible que todos disfrutemos de rincones de nuestra tierra inaccesibles hasta ahora; o los nuevos tramos de la carretera de circunvalación que han mejorado el tráfico y la seguridad en esta importante vía de tránsito.
 
 No quiero terminar sin hacer un reconocimiento público a todos los trabajadores de Melilla, a todos los empleados públicos y privados de Melilla que la hacen cada día mejor y más rica. Y quiero dar también un apoyo de corazón a los componentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a los de nuestra Guarnición que con su trabajo diario garantiza nuestra seguridad y hacen posible que ejerzamos nuestros derechos en libertad.
 
 
 
 
 
 
Por último, quiero tener un recuerdo para aquellos que nos dejaron a lo largo de 2010 y que siempre estarán en nuestro pensamiento. 
 
 Reitero mi afecto por todos los melillenses con mis mejores deseos para el Año Nuevo que espero venga cargado de felicidad, paz, concordia, trabajo y de prosperidad.
 
 
 
    Feliz Navidad y feliz año 2011 a todos.
 
 Gregorio Escobar Marcos, delegado del Gobierno en Melilla.