García Seco destaca la protección y promoción de la dehesa como un reto para la sociedad extremeña desde el punto de vista económico, social y medioambiental

III Congreso Ibérico de la Dehesa y el Montado

20/11/2018


• Lo dijo durante la celebración del Congreso Ibérico de la Dehesa y el Montado, en Badajoz, donde explicó la posición del Gobierno Central en la defensa de este ecosistema


La delegada del Gobierno en Extremadura, Yolanda García Seco, participó hoy en el III Congreso Ibérico de la Dehesa y el Montado, celebrado en Badajoz, donde destacó la proyección y promoción de la misma como uno de los grandes retos al que se enfrenta la sociedad extremeña desde el punto de vista económico, social y sobre todo, puntualizó, medioambiental.

Durante su intervención, García Seco advirtió de que “debemos estar preparados para vencer los peligros que amenazan la continuidad del ecosistema de la dehesa y apostar por los enormes beneficios que aporta”.

Por otro lado, destacó que frente a esas amenazas, la dehesa debería situarse en el próximo escenario de las políticas agrarias europeas en una situación ventajosa en el marco de la estrategia medioambiental, algo que planteó como esperanza frente a la “incertidumbre de una Política Agraria que no ha sabido entender las especiales características de la dehesa”.

En su discurso acerca de la dehesa-montado y en el marco de la próxima reforma de la Política Agraria Común, la delegada del Gobierno abogó por un marco regulatorio que garantice la sostenibilidad económica y ambiental de la misma. “Los agricultores deben ser compensados por las rentas no percibidas y por los costes afrontados y tener incentivos para prácticas medioambientales y climáticas más ambiciosas que vayan más allá de las condiciones obligatorias”, dijo.

La posición del Gobierno

Sobre la posición común que el Gobierno de España llevará a la Unión Europea, la delegada del Gobierno aseguró que será una estrategia que pase por el reconocimiento de los pastos permanentes de la dehesa “para que no volvamos a vivir la aberración que supuso el no reconocimiento de encinas y alcornoques como pastables y por lo tanto superficies elegibles para los pagos de las ayudas”.

“La posibilidad de acordar un plan estratégico nacional en el que se establezcan los objetivos y prioridades de España nos va a permitir garantizar la sostenibilidad de las explotaciones de dehesa vinculadas a la ganadería extensiva y adaptar los requisitos y condiciones a sus características especiales”, añadió.

García Seco citó varios desafíos a los que se enfrenta la dehesa y el montado y entre ellos mencionó la regeneración del arbolado; la mejora de los pastos; actuaciones para evitar la pérdida y degradación del suelo; la protección del patrimonio genético animal y vegetal, priorizando la conservación de las especies autóctonas, la economía circular o la revalorización de la producción agraria y recordó que estos desafíos “nos afectan a todos: empresa, gestores, propietarios, asociaciones, centro de investigación y administraciones de ambos lados de la raya”.

En este sentido, destacó como algo esencial el impulso que desde el Gobierno Central, la Junta de Extremadura y el Gobierno portugués, se está dando a la cooperación gracias al fomento, por ejemplo, de los grupos operativos de innovación.

Para finalizar, García Seco destacó la marca de calidad del cerdo ibérico como instrumento esencial de puesta en valor de las producciones ligadas a la dehesa y advirtió sobre la necesidad de estar en alerta ante una serie de amenazas que se ciernen sobre el sostenimiento de la misma como son la seca de las encinas o la peste porcina.

Sobre este asunto, recordó que ayer el Consejo de Agricultura de la Unión Europea acordó la creación de un grupo de alto nivel sobre el porcino, que debe proponer y buscar soluciones a la crisis que está generando la aparición de Peste Porcina Africana, “una gravísima amenaza a la que hay que poner freno en todos los frentes con medidas de protección adecuadas ante las posibles consecuencias que puede tener”.

“El Gobierno promoverá la adopción y aplicación de planes estratégicos para la biodiversidad; la actualización de los planes existentes para garantizar la preservación y una gestión responsable del territorio en coordinación con el resto de administraciones; y estímulos para evitar el despoblamiento, reconociendo el papel fundamental de las poblaciones rurales como garantes de la biodiversidad”, declaró  la delegada del Gobierno, que ligó el reto demográfico a una estrategia de acción común para la que la dehesa y el montado son un ejemplo, dijo, de asentamiento en zonas con elevado riesgo de despoblación.