Itxaso comparte con Gogoan- Por una Memoria Digna, Elkarbizi y Fundación Fernando Buesa la necesidad de deslegitimar los homenajes públicos a presos de ETA

Itxaso comparte con Gogoan- Por una Memoria Digna, Elkarbizi y Fundación Fernando Buesa la necesidad de deslegitimar los homenajes públicos a presos de ETA

03/05/2021

Las tres asociaciones, que trabajan en materia de convivencia y memoria, se han reunido con el delegado del Gobierno y le han entregado un documento en el que piden una reflexión sobre la presencia de los victimarios en el espacio público

 

El delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso se ha reunido hoy con representantes de Gogoan-Por una Memoria Digna, Elkarbizi y la Fundación Fernando Buesa, con quienes ha compartido la necesidad de poner fin a los homenajes públicos a los presos de ETA. Los conocidos popularmente como 'ongi etorris' consisten en recibimientos públicos de bienvenida a los presos de ETA a su salida de prisión. La reunión, a la que han asistido Joseba Eceolaza (Gogoan-Por una Memoria Digna), Natxo Iceta (Elkarbizi), Pello Sasiain (Elkarbizi) y Eduardo Mateo (Fundación Fernando Buesa), coincide con el tercer aniversario del anuncio de la disolución de ETA ocurrida el 3 de mayo de 2018.

Las tres entidades, que trabajan en materia de convivencia y memoria, han entregado a Itxaso el documento Los victimarios en el espacio público, un texto en el que se aboga por que los espacios públicos en cada localidad sean un ámbito de convivencia y, por tanto, no acojan ni actos ni mensajes que idealicen a los miembros de ETA o reflejen su simbología.

Este documento también se ha trasladado a otras instituciones como el Gobierno Foral de Navarra y la Asociación de Municipios Vascos-Eudel, que lo han apoyado. También se ha tratado mediante mociones en algunos ayuntamientos como el de Vitoria-Gasteiz, Donostia/San Sebastián y Zarautz, que también lo han respaldado.

Denis Itxaso ha reconocido el trabajo que están realizando estas asociaciones, ha ratificado el compromiso del Gobierno con la memoria y la convivencia y ha recalcado la necesidad de deslegitimar cualquier acto de homenaje, exaltación o visibilización de ETA, de sus miembros o su entorno. “La mejor manera de legitimar un sistema penitenciario dirigido a la resocialización, con mirada humana y que confía en la rehabilitación de las personas que entran en la cárcel, es ayudarles a su salida, a rehacer sus vidas”, ha apuntado el delegado. En ese sentido, “devolver a ese preso su más oscuro pasado con los ‘ongi etorris’ es precisamente lo contrario a lo que debemos hacer. El sentido de las penas privativas de libertad es el de contribuir a que los presos al salir puedan reiniciar un futuro y una vida nuevas, dejando atrás ese pasado que los condenó. Es elemental, pero todavía hay que insistir en esta pedagogía democrática para que no se idealice el historial macabro de personas que queremos rehabilitadas cuando salen de la cárcel”.

Para Gogoan-Por una Memoria Digna, Elkarbizi y la Fundación Fernando Buesa, “el silencio de las armas tiene un efecto sonoro evidente; en él se oye con más nitidez el desprecio con el que a veces se ha tratado a las víctimas. Hoy sin embargo tenemos el deber histórico y ético de hacer las cosas de otra forma. En la nueva sociedad post ETA no caben más humillaciones hacia las víctimas. En esto no podemos seguir siendo prisioneros del pasado porque para avanzar como sociedad necesitamos extender la cultura de la deslegitimación de la violencia en todos los espacios”.

Por todo ello,  plantean en el texto que se pongan fin a los homenajes públicos a los presos de ETA; que los ayuntamientos garanticen que los espacios públicos de sus municipios sean un ámbito de convivencia, sin mensajes que idealicen a los miembros de ETA y que se constituyan foros municipales para impulsar espacios y murales locales destinados a reforzar los valores de la memoria democrática, la convivencia y la deslegitimación de la violencia.