La Guardia Civil de La Rioja desarticula una banda organizada dedicada al hurto de prendas de vestir en Centros Comerciales.

La Guardia Civil de La Rioja desarticula una banda organizada dedicada al hurto de prendas de vestir en Centros Comerciales.

05/01/2012

 Los presuntos delincuentes actuaban en centros comerciales de Zaragoza y La Rioja.
Efectivos de la X Zona de la Guardia Civil de La Rioja han detenido a los integrantes de una banda organizada, especializada en el hurto de ropa de centros comerciales de Zaragoza y La Rioja. Los detenidos son cuatro personas, 3 varones y una mujer, naturales de Rumanía y un cuarto varón de Logroño, que actuaban de forma coordinada y se comunicaban a través de signos por el interior de los comercios.
Los hechos que han dado lugar a estas detenciones se iniciaron a finales del mes de noviembre, a raíz de un robo cometido en un establecimiento, tipo outlet, dedicado a la venta de ropa, ubicado en el Polígono Raposal de Arnedo. Tras estos hechos se estableció un dispositivo de control y vigilancia, tanto en el establecimiento afectado como en la zona comercial. Una vez Interceptados e identificados, los detenidos han sido trasladados hasta dependencias policiales. También ha sido inspeccionado un turismo de su propiedad, localizándose en su interior 60 prendas de vestir, valoradas en más de 2.000 €, así como el albarán de una empresa de transporte, que remitía un paquete postal desde Zaragoza hacia Logroño, localizándose en el interior de este paquete otras 18 prendas de vestir valoradas en más de 1.300€.
Durante la investigación se ha descubierto que la ropa hallada en el vehículo había sido sustraída de seis tiendas de la localidad de Arnedo, y la remitida mediante paquetería postal, había sido sustraída en tiendas del Centro Comercial Plaza Imperial de Zaragoza como DESIGUAL, BLANCO, FOOT LOCKER o DÉCIMAS. Para sustraer las prensas de vestir los presuntos autores de los hechos utilizaban bolsas forradas de aluminio. Una vez cometían el hurto trasladaban las prendas hasta el vehículo, donde procedían a quitarles las alarmas con material adecuado, seguidamente la empaquetaban y se la auto-enviaban a través de empresas de transporte, evitando con este hecho que la misma fuera localizada en cualquier control policial.