Segura: “La trata es una forma de esclavitud y un delito que convierte a las personas en mercancía”

Segura: “La trata es una forma de esclavitud y un delito que convierte a las personas en mercancía”

23/09/2022

• “España es uno de los principales países de tránsito y destino de víctimas de trata en Europa”, revela

• Destaca el Plan Camino y aboga por poner los medios “para alejar a mujeres y niñas de la violencia garantizando su protección”


“La trata es una forma de esclavitud y es un delito que atenta contra las personas, convirtiéndolas en mercancía”. La Jefa de la Unidad Contra la Violencia de Género, Laura Segura, con motivo del Día Internacional contra la Explotación Sexual y el Tráfico de Mujeres, Niñas y Niños, que se conmemora hoy, ha recordado que esta lacra afecta a miles de personas cada año en nuestro país.

“La trata está directamente relacionada con la posición de las mujeres en la sociedad y la feminización de la pobreza”, ha asegurado, y ha apuntado que es una manifestación más de la desigualdad en la que se encuentran las mujeres en el mundo, “situación que las hace más vulnerables a la captación y explotación”.

Además, en palabras de Segura, es una realidad “que adquiere preocupantes dimensiones en la actualidad, debido a los grandes beneficios que proporciona” pero, sin embargo, “es una realidad que a día de hoy sigue estando oculta e invisible”.

Para acabar con ella, ha agregado, es necesario “visibilizarla y tomar conciencia de su existencia en nuestro entorno, es necesario mejorar la recogida de datos y mostrarlos a la sociedad, pero también mostrar relatos, poniendo a las personas en el centro, a la mujer en el centro”.

“Los datos disponibles apenas reflejan la punta del iceberg”, ha lamentado, algo que saben las ONGs que se dedican a atender a las personas víctimas de trata y explotación sexual. “Ven como sus cifras no coinciden con las oficiales,  puesto que barajamos datos que dejan a muchas víctimas ocultas e invisibles, tanto a los ojos de las autoridades como a los de la sociedad en general”, ha denunciado.

Sin embargo, ha aclarado que las cifras son fundamentales puesto que pueden ayudar a tomar decisiones más acertadas por parte de los distintos actores implicados, y “sin datos no pueden plantearse soluciones”.

“No podemos dejar de recordar que el destino de las víctimas de trata con fines de explotación sexual es la prostitución”, ha recordado Segura, que ha hecho hincapié en que la trata con fines de explotación sexual y prostitución confluyen, y que la recopilación de datos es clave también para conocer la magnitud de la conexión.

Tercer país consumidor del mundo

Tal y como ha explicado, la mitad de las víctimas de trata en el mundo lo son con fines de explotación sexual. Y, si se pone el foco solo en las mujeres, la trata sexual llega al 77% de los casos según los datos de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.

Dentro de la trata sexual la mayoría de las víctimas son mujeres (67%) o niñas (25%), según la ONU. “Las mujeres y niñas suponen 9 de cada 10 víctimas de trata sexual”, ha apuntado. Es más, en la Unión Europea, desde 2008, la explotación sexual es la forma más frecuente de trata. “El 60 % de las víctimas son objeto de trata con fines de explotación sexual y más del 90 % de las víctimas de trata con fines de explotación sexual son mujeres”, ha señalado.

En nuestro país se convierte en un problema aún mayor al figurar como primer país consumidor de prostitución de Europa y el tercero del mundo. “Es uno de los principales países de tránsito y destino de víctimas de trata en Europa y se cree que más del 80% de las mujeres prostituidas en España lo hacen forzadas, de las que entre el 90 % y el 95% sería víctimas de trata”, ha explicado.

“La trata no es neutral en términos de género, afecta a las mujeres de forma desproporcionada y es una de las formas más crueles de violencia sobre las mujeres”, ha recalcado.

Perfiles y factores

La Jefa de la Unidad Contra la Violencia de Género ha querido aclarar que cualquier persona puede ser víctima de trata, aunque existan factores de riesgo. “Es precisamente la visión de la trata como algo que afecta a determinados colectivos, lo que conlleva a su vez la invisibilización”, ha expuesto.

Sin embargo, ha señalado que no hay perfiles de mujeres que sean víctimas de trata, aunque sí factores de riesgo. “El factor de riesgo es ser mujer, tener una edad que no supere los 25 años y haber nacido en un espacio donde hay una extrema vulnerabilidad, y falta de igualdad de oportunidades”, ha relatado.

Así, la crisis del COVID-19 y la situación internacional agravada con la guerra de Ucrania, tienen un doble impacto en las personas más vulnerables. Uno de los colectivos más afectado por las crisis, es el de las mujeres migrantes y las menores, que están más expuestas que nunca a ser captadas como víctimas de la trata de personas.

Además, ha asegurado que en este momento el negocio de la explotación sexual continúa extendiéndose y adaptándose a las nuevas realidades, mediante la captación de más mujeres y niñas a través de ofertas de empleo falsas y la promesa de unas condiciones de vida mejores, y las que estaban siendo explotadas han visto empeorar su situación.

Por ello, ha indicado que es esencial el trabajo en sensibilización y sobre todo en la formación y capacitación de profesionales para la detección y actuación en los casos de trata y explotación sexual, así como el trabajo en red.

“España  es espacio de tránsito y de destino de la trata pero es también es un país de origen, de ahí que sea fundamental facilitar posibilidades de formación a las personas e instituciones implicadas en la lucha contra este delito, para que  las víctimas de trata, puedan pasar de ser víctimas a supervivientes, siendo esencial una asistencia integral, situaciones de la que es imposible salir sin los mecanismos de protección adecuados”, ha relatado.

Protección de los menores

La Jefa de la Unidad ha recordado que otro aspecto clave para abordar esta lacra es el enfoque de infancia, dado que es necesaria la protección de los menores a cargo de la víctima, el acompañamiento especializado e identificar situaciones de trata/ explotación sexual.

Más aún cuando este fenómeno cuenta con escasa visibilidad de la infancia. Prueba de ello es que los datos oficiales recogen una cifra muy por debajo a la realidad que describen las propias víctimas y, según las cuales, el 62% de las mujeres en procesos de trata con fines de explotación sexual aseguran haber sido iniciadas en la prostitución cuando eran menores de edad.

“Cuando no se les ve, no se les protege y no forman parte de las estadísticas, con lo cual estamos perdiendo una gran parte del panorama de la trata en nuestro país”, ha expuesto Segura.

Frente a ello, ha aseverado que, un análisis correcto de esta realidad, “nos permite afirmar que la trata no es un fin en sí mismo sino un medio a través del cual se llega a explotación sexual”.

“La trata marca la entrada en el sistema prostitucional y a este delito se le suma uno más, la explotación sexual”, ha denunciado y ha añadido que no se puede dejar de poner el foco en la prostitución como sistema, así como en la demanda de prostitución, principal causa de este grave atentado contra los derechos humanos y pilar principal del sistema patriarcal.

“En España se contabilizan en torno a 1.700 clubs de alterne y el 39% de los hombres reconoce haber consumido prostitución”, ha divulgado, por lo que la concienciación en el rechazo y la condena social de la normalización del consumo de prostitución es fundamental para su erradicación y para una transformación social a favor de la igualdad.

Para acabar con las situaciones de explotación, una vez detectadas y con procesos de acompañamiento con éxito, es clave dar una alternativa real a las mujeres, ganar la confianza en las instituciones y en la administración. Para ello Segura añade que “hay que darles la voz a las mujeres que la sufren, para que pauten qué aspectos son claves y puedan reconocerse como víctimas y no como culpables”.

“Debemos poner todos los medios para alejar a las mujeres y niñas de la violencia y el maltrato, garantizando la protección y reparación”, ha agregado. Y en este sentido ha apuntado la necesaria reformulación de nuestra sociedad puesto que si no hay demanda, no hay venta o explotación de mujeres.

Plan Camino

El Consejo de Ministros ha aprobado el pasado martes el Plan Camino para dar alternativas económicas, laborales y sociales a las víctimas de trata, explotación sexual y mujeres en contextos de prostitución.

El Plan establece acciones con el objetivo general de operativizar las medidas recogidas en la Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual y complementar las acciones del Plan Estratégico Nacional contra la Trata y la Explotación de Seres Humanos 2021-2023 en lo relativo a la trata con fines de explotación sexual.

“Se concibe como una política palanca que desarrolla todas las actuaciones que competen al Ministerio de Igualdad respecto a la trata con fines de explotación sexual, la explotación sexual y el apoyo a las mujeres en contextos de prostitución”, ha explicado.

Se trata de “un paquete de medidas pioneras para reparar las vidas y la historia de estas las mujeres, a la vez que garantiza el acceso a vivienda, educación, sanidad, formación y empleo”, ha apuntado.

Así, el Plan Camino incluye 28 medidas en 5 líneas de acción a implementar entre 2022 y 2026 que nunca antes habían sido abordados por un gobierno, y una dotación económica estimada en 204 millones de euros.

La prioridad es dar salida a las víctimas a través de la inserción socio laboral. Una salida que debe ir acompañada de alternativas económicas y sociales que garanticen los derechos de las mujeres.

Por otro lado, se trabajará intensamente en la prevención y desincentivo de la demanda, llegando a jóvenes y hombres a través de campañas de sensibilización y trabajando desde las escuelas y desde espacios de socialización cruciales para ello.